Blasfemar contra el Ruaj de kadushá

 

Nuestra Emunah (Estudios)

Blasfemar contra el Ruaj de kadushá

Jimmy Zubarzo – Estudio 19

13/02/2024 – 15:50 hrs

Siempre creímos que blasfemar contra el Ruaj de Yahweh, que en ese tiempo llamábamos espíritu santo, era ir contra una persona, la tercera persona de la trinidad, cosa que es totalmente contraria a la Toráh, pues Yahweh es solo uno y no existe nadie más que Él. Por lo tanto, blasfemar era rechazarlo y estar en contra de él y no creer a su obra en los creyentes, era un pecado imperdonable eternamente. ¿Dónde está el error? El error está en creer que es una tercera persona y creer que si lo rechazamos, no podría conducirnos al arrepentimiento y por ello estaríamos perdidos por la eternidad. Finalmente, es una mezcla de politeísmo y Toráh en cierto sentido.

La definición de Blasfemia que amonesta el Adon Yahshua está referido a estar en contra y rechazar a quien hace la obra, es estar en contra de la Toráh, es estar en contra de los mandamientos, es estar en contra del mismo Mashiaj. Recuerden que el Ruaj es de Yahweh, es el poder de Yahweh y en ese poder transita tanto Yahweh, como Yahshua y la gracia que nos ayuda en nuestra vida, rechazarlo es entonces cerrar la única puerta a nuestra salvación y que es Yahweh mismo y su voluntad y eso es Toráh.

MatiiYah 12:31-32. Por tanto, les digo: toda clase de pecado y blasfemia será perdonada a los hombres, pero la blasfemia contra el Ruaj Hakodesh no les será perdonada. 32. Y cualquiera que diga alguna palabra contra el Ben Ha Adán, será perdonado; pero el que hable contra el Ruaj Hakodesh no será perdonado, ni en el olam hazeh (este mundo) ni en el olam haba (mundo venidero).

En palabras coloquiales podemos decir que el Pasuk expresa la idea que cualquier pecado que cometamos y lo mal que digamos puede ser perdonado, incluso si hablamos mal del hijo del hombre, pero hablar mal y rechazar al Ruaj de Yahweh es imperdonable, pero no porque Yahweh no nos quiera perdonar, porque si existe arrepentimiento, sin duda se cumple su palabra y la salvación de Yahshua se derramaría. El punto es que quienes blasfeman mantienen una oposición totalmente consciente y dura contra la Emet de Yahweh, esto aleja por completo al ser humano del arrepentimiento necesario para su salvación. La auto condenación es blasfemar contra el Ruaj, que es Yahweh mismo. Recuerden que por años vivimos rechazando al Mashiaj siguiendo creencias erradas y paganas, viviendo en terribles pecados y rebelándonos a todo y hoy por gracia somos hijos de Yahweh, conocemos su verdad, la amamos y la vivimos. (Extracto la Toráh responde 33).

Un duro ejemplo

El ejemplo más irrebatible es lo que la Toráh exhorta acerca de los Malajim custodios que pecaron al fornicar con las hijas de los hombres, estos Malajim que tenían la misión de resguardar a los hombres se transformó en un gran pecado contra Yahweh, ellos corrompieron a la raza humana de este tiempo, al punto de devorarlos y comer sus carnes, su pecado fue abominable, pues conociendo, el amor, la verdad, la justicia, la ira y furor de Yahweh igualmente decidieron pecar, rebelándose ante el eterno, su pecado fue falta de temor ante el Abba, luego rebeldía, luego apostasía y por ende perdición sin derecho a réplica o misericordia, solos se convirtieron en enemigos de Yahweh y rebeldes a su voluntad, esto cerró por completo cualquier muestra de compasión hacia ellos, pues su pecado, odio y perversión superaban cualquier vestigio de Teshuvá en sus corazones. No fue hasta que se vieron confrontados directamente por el Abba que el temor vino a sus vidas, pero después que tenían a casi toda su creación al borde de la extinción y corrupción. (Lean el estudio “LOS MALAJIM QUE PECARON”)

Mis amados hermanos, así como el amor del Abba estaba de lleno como respaldo sobre sus malajim custodios para cuidar de su creación, así también ese inmenso amor ahora está manifiesto en su hijo Yahshua, quien nos redime y devuelve la dignidad para volver a casa, pero así como los malajim rechazaron la voluntad del Abba y hoy están sentenciados a perdición, lo mismo ocurrirá con quienes rechazan al Mashiaj y la voluntad del Abba. Al ser opositores a la verdad, son opositores a su Ruaj, lo rechazan, lo ofenden, por esto ellos mismos se condenan, no tendrán salvación ni ahora, ni en los siglos venideros, dejarán de ser. Todo aquel que, conociendo la verdad, la cambia por mentiras, por religiones, por ritos y tradiciones, por mandamientos de hombres, por celebraciones paganas, no podrán jamás ver o disfrutar la gloria de Yahweh, el reino de su hijo y la vida eterna, porque han blasfemado.

El ejemplo de adjudicar la obra del Ruaj a las tinieblas

El rechazo a la obra de Yahweh en el Mashiaj, es menospreciar su voluntad, es rebelarse a su Toráh, esto hicieron los fariseos cuando Yahshua liberó a un endemoniado ciego y mudo, ellos dijeron que por obra de Ha-Satán expulsaba demonios. El pecado de blasfemia era evidente en los líderes religiosos, pues asignaron la obra del Ruaj de Yahweh en el Mashiaj a Ha-Satán, decían que el Mashiaj mismo estaba poseído y que Yahweh fuera con Él. Su pecado fue de rebeldía, menospreciaron las profecías del tanaj acerca de Yahshua y mantuvieron sus creencias e ideas por sobre lo que estaban viendo que claramente era una obra de sanidad y rescate de un perdido. La blasfemia son duda es rechazo a la voluntad de Yahweh y siempre comienza con rebeldía.

MatiiYah 12:22-31 Entonces le llevaron un poseído por un shad, ciego y mudo; y lo sanó, de tal manera que el ciego y mudo veía y hablaba. 23 Y toda la gente estaba atónita y decía: ¿Será éste el Ben Dawid? 24 Pero los Prushim, al oírlo, decían: Este no echa fuera a los shadim sino por báal-zebul, príncipe de los shadim. 25 Y sabiendo Yahshua los pensamientos de ellos, habló diciendo: Todo maljut dividido contra sí mismo, es asolado, y ninguna ciudad o bayit dividida contra sí misma permanecerá. 26 Y si hasatán echa fuera hasatán, contra sí mismo está dividido; ¿Cómo, pues, permanecerá su maljut? 27 Y si yo echo fuera los shadim por báalzebul, ¿Por quién los echan sus benei? Por tanto, ellos serán sus shofetím. 28 Pero si yo por el Ruaj de Yahweh echó fuera los shadim, ciertamente ha llegado a ustedes el Maljut de Yahweh. 29 Pues, ¿cómo puede alguno entrar en la bayit del hombre fuerte y saquear sus bienes si primero no lo ata? Entonces podrá saquear su bayit. 30 El que no está conmigo, está contra mí; y él que conmigo no recoge, desparrama; 31 Por tanto les digo: toda clase de pecado y blasfemia será perdonada a los hombres, pero la blasfemia contra el Ruaj HaKodesh no les será perdonada.

El caso del Melej Shaul

En el tanaj tenemos varios casos de blasfemia contra Yahweh mismo y era la rebeldía y oposición a su voluntad. Podemos ver como pueblos completos y que fueron rebeldes a Yahweh y enemigos de Yisrael fueron consumidos en su furor, podemos ver como pueblos del mismo Yisrael también fueron consumidos por su rebeldía como la tribu de Core, lo mismo ocurrió con varios reyes y líderes que tuvo Yisrael, quienes también fueron raídos de la tierra y de la heredad de Yisrael por ser opositores y blasfemos a la santidad del Abba.

El caso del melej Shaul es el más evidente, su pecado fue más allá de lo que cualquier melej en ese tiempo habría hecho, desde ser elegido por un pueblo rebelde y terco, ser celoso de Dawid a quien Yahweh había elegido en su lugar y desear asesinarlo toda vez que tenía oportunidad, hasta presumirse sacerdote y hacer lo que no le correspondía, reemplazando al profeta Samuel. La carnalidad, terquedad y abuso de confianza de Shaul, lo llevó a hacer lo que rebalsaría la copa y que fue consultar a la bruja de endor para poder conocer la voluntad de Yahweh, cuando Yahweh ya lo había desechado, siendo engañado por un ruajim disfrazado de Samuel el profeta. Su pecado fue trágico y blasfemo y Yahweh mismo lo desecho.

Algunos creen que si fue salvo, por misericordia, pues al leer los pasukim de la torah ven a un hombre torpe, rústico y apasionado y que eso lo hacía errar, pero vemos claramente lo contrario por la declaración del mismo profeta Samuel, quien dice que por su pecado altivo, soberbio y carnal, Yahweh lo ve como enemigo, como adversario, en definitiva como un blasfemo y hereje.

Shemuel Alef 16:14 Para entonces el Ruaj de Yahweh se había apartado de Shaul, y comenzó a aterrorizarlo un ruaj malo de parte de Yahweh. (Esta expresión indica que quedo sin la cobertura y respaldo de Yahweh y Ha-Satán lo atormentaba).

Shemuel Alef 28: 16 Shemuel dijo: ¿Por qué me preguntas, viendo que Yahweh se ha apartado de ti y se ha vuelto tu adversario? 17 Yahweh ha hecho por sí mismo como predijo por mi medio: Yahweh ha arrancado el reinado de tus manos y se lo ha dado a tu compañero, a Dawid.

¡Cuidado! todos los que conocemos Toráh y la obedecemos, de ver lo que no existe y de creer verdad aquello que no lo es, no podemos darnos el lujo de rechazar la obra y voluntad de Yahweh envaneciéndonos en nuestros propios criterios y pensamientos. La apostasía es la muestra más concreta de blasfemia y es lo que esta dominando a Israel en el medio oriente y a muchos renacidos en la kajal que cavilan en dos pensamientos, sin ser Yahweh y su voluntad el centro de su vidas ¡Cuidado! 

Con amor en Yahshua. Jimmy Zubarzo