El grano de Mostaza

 

Nuestra Emunah (Estudios)

El grano de Mostaza

Jimmy Zubarzo – Estudio 50

26/7/2024 – 20:58 hrs.

Cada vez que leemos acerca del grano de mostaza, siempre pensamos que se refiere a que si tuviésemos fe como el grano de mostaza, que es la semilla más pequeña de las hortalizas, podríamos mover montañas, es decir, que a pesar de lo pequeña que pueda ser, si es real podemos lograr imposibles. Al menos eso fue lo que siempre me enseñaron acerca de la fe pequeña, pero verdadera. También surgieron frases que explicaban esta metáfora y todas hacían referencia a una fe pequeña, pero efectiva. Era solo cosa de imaginar lo que lograríamos si tuviésemos una fe grande. Algunas frases eran:

Podemos tener una fe pequeña, pero depositada en un gran Elohé.

Podemos tener una fe pequeña, pero un gran poder.

No importa si la Fe que pones es pequeña, es Elohé quien pone el gran milagro.

Para lograr grandes cosas, no necesitas una gran fe, si es como el grano que mostaza, es suficiente y etc.

Todas estas frases se añadían al contexto del grano de mostaza y todas eran para lograr y obtener el favor del cielo para cumplir objetivos o sueños. A estas alturas y por lo que ya comprendemos de la voluntad de Yahweh, toda esta posibilidad de realizaciones y metas, no es lo que la Toráh exhorta como mensaje central tocante a la Fe. La Emunah va más allá y su mayor énfasis es la salvación y la vida nueva en el Mashiaj.

Comprendiendo la metáfora según Mardokhay 4:31

La comparación que hace el Adon acerca de la Emunah al usar la semilla de mostaza, aunque es una semilla pequeña, no está referida a su tamaño. Eso está en Mardokhay 4:31 y allí se exhorta la comparación, pero es acerca del reino de los cielos y no precisamente de la fe. En este contexto, el Adon es totalmente claro, dice a modo de pregunta: ¿A qué compararemos el reino de Yahweh? Leamos el pasuk.

Mardokhay 4:30-31. Así habló Yahshua diciendo: ¿A qué compararemos el Maljut de Yahweh? ¿Con qué ejemplo lo podemos comparar? 31 Es como un grano de zerá de mostaza, la cual, cuando es sembrada en la tierra, es la menor de todas las semillas que hay; 32, pero cuando es sembrada, crece, y se hace más grande que todas las hierbas, y le brotan grandes ramas; tanto, que las aves del aire pueden posarse bajo su sombra.

Cabe destacar que la semilla de mostaza, justamente por ser pequeña, es altamente germinable y una vez sembrada nada impedirá que germine, crezca y se vuelva un gran árbol, cualidad que también tiene el reino de Yahweh, que una vez implantado en sus hijos verdaderos nada lo destruirá y cobijará a todo aquel que se arrepienta de sus pecados en obediencia al Mashiaj.

Comprendiendo la metáfora según MatiiYah 17:20-21

Es necesario hacer la aclaración acerca del tamaño de la semilla de mostaza. Es pequeña, pero no es la más pequeña, pues las hay que son diminutas. El Adon hace referencia a las hortalizas que se daban en Israel y la mostaza, en relación con todas ellas, era la más pequeña.

En MatiiYah 17:20-21 también se usa la comparación del grano de mostaza, pero esta vez sí es con la fe, pero no es acerca del tamaño, sino de las características de la semilla. Toda vez que leemos en la Toráh, alegoría o metáforas, siempre es para ilustrar la enseñanza y la semilla de Mostaza; es eso, una demostración de cómo debe ser nuestra Emunah en Yahweh. En el contexto de MatiiYah 17, la exhortación es porque los talmidim no pudieron liberar a un joven lunático y el Adon los reprende y exhorta acerca de la fe necesaria que deben tener. La semilla de mostaza tiene connotaciones que ninguna otra semilla tiene:

Es una semilla que al sembrarla crece rápido y forma un gran y poderoso árbol.

Es la semilla más resistente, aunque la pises no se destruye.

Es una semilla híbrida, no se puede mezclar con ninguna otra semilla.

Por lo tanto, la fe que exhorta el Adon debe ser como la fe que Yahweh nos exige; debe crecer rápido, debe ser fuerte y debe ser genuina asentada 100% en el Adon y en la Toráh de Yahweh, y con eso nada nos será imposible.

MatiiYah 17:20 Yahshua les respondió: Por su incredulidad; de cierto, les digo que, si tienen emuná como un grano de mostaza, diréis a este monte. Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada les será imposible. 21 Pero este género solo sale con tefilat. (El ayuno es un añadido posterior).

Recuerden, que nuestra Emunah no crece porque nuestro nivel de credulidad aumente, sino porque la voluntad de Yahweh se hace evidente en nuestra vida y dejamos de ser lo que alguna vez fuimos, pecadores y perdidos. Ahora somos hijos de Yahweh, ciudadanos del reino, obedientes a los mandamientos de Yahweh, nuestra obediencia sin duda forja la convicción y certeza correcta de lo que Yahweh y nuestro Adon pueden hacer por ser fieles, es eso lo que finalmente la Emunah desarrolla en los hijos de Yahweh, convicción y certeza total de que Yahweh es capaz de hacer imposibles por amor a nosotros y a todos los que temen y creen en su nombre.

Los talmidim no pudieron expulsar un demonio y el Adon los reprendió. La razón es que aún no se forjaba en ellos la confianza suficiente en el Adon, aunque lo habían visto obrar milagros. La voluntad de Yahweh fue ignorada u olvidada y lo más probable es que hayan actuado desde sus convicciones y de manera reactiva, en vez de comprometidos con la verdad que el Adon les había entregado, lo que facilitó la duda en ellos en vez de la correcta Emunah. Podemos elucubrar diversos razonamientos al respecto, pero sin duda todos redundaran en lo mismo, dudaron del poder de Yahweh en ellos. Podemos notar más adelante cuando el Adon asciende al Shamaim, que todos los talmidim maduraron y esta vez todos manifestaron en sus propias vidas, la vida misma del Adon, al punto de que hasta la sombra de Kefa sanaba a quienes creyeron y diversos milagros que consternaron a Yisrael en el tiempo más asombroso e impactante del tiempo de los Shelujim en la expansión de reino. 

Hoy en día, los matices políticos, sociales y religiosos, distan del tiempo vivido por los Shelujim, pero el pecado es exactamente el mismo en todo el olam. La Toráh recorre todo el planeta, todas las profecías casi están cumplidas, solo resta el final de las cosas y el regreso triunfal del Adon. La Emunah aún mantiene todo su potencial tanto o más que en el tiempo antiguo, pero está limitada a su Kajal de modo exclusivo y todo su efecto está dirigido a la salvación y la vida nueva en el Mashiaj y como siempre digo, todo aquel que haga Teshuvá y se vuelva al Abba mediante el Adon podrá gozar de este asombroso don que nos revela con cuan grande amor Yahweh nos ha amado. Shalom alejem.

Con amor en Yahshua, Jimmy Zubarzo