No erremos y fallemos por ser religiosos obedientes

Nuestra Emunah (Estudios)

No erremos y fallemos por ser religiosos obedientes

Jimmy Zubarzo - Estudio 85

20/8/2023 - 20:04 hrs

Cuando Yohanan  dijo que no amaramos al mundo, ni las cosas que están en el mundo, se refería a sus pecados, pasiones, tendencias nocivas, a su idolatría, paganismo, en definitiva, a todo lo que el mundo vive y que lo aparta de Yahweh. Eso es mandamiento y lo debemos obedecer, pero muchos por considerar que todo está contaminado se han vuelto extremos en su obediencia a los mandamientos, cayendo en religiosidad, provocando que fallemos y erremos en una obediencia farisea.

Yohanan Alef 2:15-16 No amen al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el Ahavah del Abba no está en él; 2:16 porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la arrogancia de la vida, no proviene del Abba sino del mundo.

Noten que el pasuk exhorta que las cosas que ama el mundo, son los deseos carnales o deseos malos o perversos, los deseos de los ojos o codiciar todo lo que vemos, la altivez de tenerlo todo o ser más que los demás, nada de eso proviene de Yahweh. Esa exhortación sin duda está dentro del amplio contexto de santidad que la Toráh ordena, pero no significa que todo lo que nos rodea es pecado, sino como viviríamos en este mundo.

Si el mundo fariseo diezmaba, acudía a las reuniones y servicios de adoración en el templo y en sus sinagogas, ofrendaba para los pobres y la viuda, eran celosos de la Toráh... ¿Por qué Yahshua los condeno severamente? La razón de sus pecados, era que su obediencia y supuesta santidad estaban ceñidas al ojo, más que al corazón delante de Yahweh, el deseo de los fariseos, y que Yahshua evidenció, era que su obediencia, era para ser vistos por el pueblo y ser catalogados como santos y rectos, lo que solo era vanidad, ego e hipocresía.

Esto revela que podemos vernos muy obedientes, pero solo por apariencias y falsa piedad, las razones de la obediencia, podrían no agradar a Yahweh, sino a nosotros mismos para satisfacer el ego, el placer y deseo personal por ser reconocidos, admirados o de plano, por volver religión la verdad recibida, el mesianismo vive así su fe, han cristianizado la fe hebrea, y los judaizantes han hecho de la fe hebrea una norma legalista carente de Ruaj. El corazón es engañoso, no lo olviden. Producto de querer obedecer profundamente, algunos caen de la gracia, para sentarse en sus celos y definiciones personales de como se debe obedecer. Un mandamiento se puede corromper cuando se obedece sin considerar la santidad que lo envuelve, por juzgar y criticar al prójimo sin mansedumbre y sin Ahavah. Los mandamientos son de Yahweh, no son nuestros, nosotros debemos obedecerlos con celo, con pureza, con determinación y amor, en primer lugar por Yahweh y por su hijo Yahshua y ese amor debe ser impartido en toda la Kajal, obedeciendo cada mandamiento, todos juntos.

Si corregimos o censuramos lo hacemos considerándonos nosotros mismos en primer lugar y luego con amor y mansedumbre, amonestar, corregir y animar a quienes por diversas razones aun no logran la comprensión total de la voluntad de Yahweh, pero es obvio su deseo por alcanzar la gracia del Adon. A la mayoría se les olvida los dos últimos puntos, se gozan en amonestar y sentenciar a su prójimo, revelando así una especie de superioridad que les será tomado en cuenta cuando estén delante del Abba y olvidan corregir con mansedumbre y luego animar, así es, animar a tu hermano y hermana es vital en la rectificación, no podemos amonestar con severidad y no animarlos a persistir y seguir a adelante, reprobamos el pecado, pero no rechazamos a la persona. Shaul exhorta que conoce la bondad de la kehila en roma y que saben aconsejarse y amonestarse en esa misma bondad.

Romaniyim 15:14 En cuanto a ustedes, ajim míos, estoy convencido de que ustedes también están colmados de toda bondad, llenos de todo conocimiento, y que son capaces de aconsejarse unos a otros.

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Analicemos algunos olvidos por comparar religiosamente:

Olvidamos demostrar Ahavah/Amor:

No celebramos cumpleaños, porque es transgresión a la Toráh, tiene un trasfondo ocultista y espiritista, esto es real, pero por esto, es que muchos ya no manifiestan expresiones de amor como es el dar, el regalar, el hacer sentir bien a otros, es cierto, no necesitamos celebrar cumpleaños para hacer regalos, es pecado y practica pagana, pero tampoco es una prohibición para no hacerlo. Esto sí lo podemos hacer (regalar, dar, ofrendar, demostrar ahavah) cada vez que podamos o sintamos. Esto ha provocado que matrimonios e hijos se sientan poco amados, poco apreciados por esta ausencia de gestos afectivos, que realizándolo de la forma correcta no transgreden Toráh. No tenemos por qué asociar las prácticas paganas con gestos correctos de amor que no implican en absoluto caer en festejos paganos como lo hace el olam.  

Olvidamos honrar:

No celebramos día de la madre o día del padre, no está ordenado, ni establecido como mandamiento, pero al igual que con el rechazo de otros pecados paganos, muchos tampoco honran a sus padres y a sus madres, pues dicen que es pecado hacerlo. Esto es un mandamiento de Yahweh y no consiste en celebraciones o festejos especiales, es una honra constante y diaria hacia ellos, toda vez que podamos hacerlo, mayormente cuando ellos ya no pueden valerse por sí mismos o porque ya son ancianos. Esta honra es diversa, desde respetar y considerar sus consejos y sobre todo su legado en el conocimiento de la Toráh, hasta cuidarlos y velar por sus vidas cuando sea necesario. Los hijos que bendicen a sus padres, tiene mandamiento con promesa.

-Shemot (Éxodo) 20:12 Honra a tu padre y a tu madre, para que se alargue tú vida en la tierra que Yahweh, tu Elohé te da.

Efesiyim 6:1-2 Benei, obedezcan en el Mashiaj a sus padres, porque esto es Tzadik (Justo). 6:2 Honra a tu avi y a tu ima, que es el primer Mitzvot con promesa 6:3 para que te vaya bien y vivas largo tiempo sobre la tierra

 

Dijimos que obedecemos a Yahweh y como Padres cumplimos con los hijos y los hijos responden a esta obediencia con honra (Respeto y cuidados). Una vida larga y plena es la promesa, les ira bien, vivirán en Shalom y bajo la provisión de Yahweh por esta honra, honra que debe ser en proporción igual que a Yahweh el Padre de todas las cosas. Vemos en la Toráh vidas cortas, de hombres jóvenes que no honraron a sus Padres como fue debido y me refiero a Sansón hijo de Manoa y a Absalón tercer hijo del Melej Dawid. Ambos murieron jóvenes. Sansón conociendo su propósito delante de Yahweh cedió una y otra vez a la tentación y era dominado por un deseo vengativo. aunque Yahweh respondió a su llamado, este no dejo de pecar y aunque fue usado por El, sufrió la consecuencia de pecado y murió joven. Es obvio que, si no fue obediente a Yahweh, menos lo fue con sus Padres. Absalón quiso usurpar el trono de su propio Padre manifestando rebelión y traición además de asesinar a su hermano Amón. Al huir, pues fue descubierto, muere joven atravesado de tres flechas. No honro a su padre y por ende no se cumplió la promesa del mandato.

 

Todo hijo debe honrar a sus Padres, así como sus padres honraron a los suyos por amor y obediencia a Yahweh el Padre de todos y se cumplirá la promesa en el tiempo terrenal y mayormente en la vida eterna

Olvidamos dar:

No diezmamos, porque no está vigente, el diezmo cesó, pero no es una advertencia para NO bendecir a la Kajal, cumpliendo con lo que la Toráh sí ordena tocante a las ofrendas. Muchos descansaron de no dar nunca más el diezmo, ya que cesó por la gracia del Mashiaj, pero exageradamente también hicieron cesar el bendecir a la Kajal cada vez que pueden y bendecir al Abba en sus fiestas solemnes, olvidaron bendecir a sus hermanos, al prójimo y dejaron de hacer misericordia. Olvidaron lo que Yahweh hizo por todos nosotros nosotros. Se volvieron avaros obedientemente.  

Hacemos comparaciones odiosas y erradas:

No creemos en la teología de la prosperidad o de la super fe, pero no podemos negar la prosperidad kadosh que Yahweh ha decretado a todo su pueblo, repeler conceptos, porque suenan iguales, es una necedad. Yahweh si nos desea prósperos, pero su prosperidad no consiste, ni esta medida de acuerdo a los estándares que el ser humano concibe como prosperidad. Todo el bien de Yahweh está supeditado a cumplir y obedecer todos sus mandamientos, porque todo le pertenece a Yahweh, los cielos y la tierra. Leamos Devarim 10:13 guardando los Miztvot y leyes de Yahweh que yo te ordeno hoy, PARA TU BIEN. 10:14 ¡Ten en cuenta que el shamaim hasta sus más lejanas regiones pertenece a Yahweh tu Elohé, la tierra y todo lo que hay en ella!... 

Prosperidad es Yahweh en el corazón de sus hijos, todo bien que podemos recibir, sea lo que sea, es bien de Yahweh, El es nuestra prosperidad.

Nos volvimos intolerantes:

Antes permitíamos todo, tolerábamos todo, mezclábamos todo y Yahweh tuvo paciencia con nosotros años y años hasta que abrió nuestros ojos y pudimos comprender y hoy en día, la mayoría de los renacidos son los más intolerantes, intransigentes e inflexibles con aquellos que están recién conociendo la Emet, con aquellos que son débiles, con aquellos que son más lentos en aprender. Una cosa es que hoy seamos radicales y otra cosa es que seamos tiranos con los más débiles. No olvidemos la misericordia y amor con que fuimos recibidos estando perdidos y en pecado. 

Nos volvimos jueces:

Antes, cuando éramos religiosos, creíamos fielmente en ser pacientes, proclamadores de la paz y nuestra consigna era que éramos el pueblo más alegre de la tierra. Hoy muchos conocen la Emet y obedecen los mandamientos de Yahweh y extrañamente se volvieron agresivos y todo lo que sea contrario a la Toráh, lo atacan, lo refutan, lo rebaten acaloradamente, rechazando el mensaje y a la persona también, con claras connotaciones de repudio. Recuerden, refutamos a falsos maestros, a falsos profetas, a engañadores, cada vez que exhortamos la Toráh a la Kajal o a nuestros hermanos, pero no andamos al voleo peleando con la gente. En todas las cosas nos debe guiar el Ruaj de Yahweh y no nuestro temperamento o celo desmedido. Debemos vivir en Shalom con todos.

Romaniyim 12:17 No le paguen a nadie mal por mal; procuren lo bueno delante de toda la gente. 12:18 En cuanto sea posible, hasta donde dependa de ustedes, vivan en shalom con todas las personas.

Nos imponemos cayendo en egos y arrogancia:

El pasado supuestamente era malo, pues estábamos en delitos y pecados; sin embargo, en ese tiempo muchos estaban dispuestos a agachar la cabeza y demostrar por sobre todas las cosas lo humildes y mansos que eran. Hoy en día ha surgido una especie de sublevación por la nueva identidad en el Mashiaj y como he mencionado, es totalmente opuesto al pasado, parece que fue peor, pues si antes éramos humildes y sobrios, hoy somos más bien orgullosos, celosos pasionales, viscerales tal y como el mundo fariseo que critico y acoso al mismo Mashiaj. La Toráh no ordena odiar, menospreciar y mirar al prójimo con desprecio, sea de la Kajal o pagano, incluso nuestro Adon dijo, bendigan a quienes los persigan... ¿Qué fue eso, una muestra de debilidad o una claro mensaje de amor por los perdidos? 

Estos son solo algunos errores y pecados que cometemos cuando obedecemos religiosamente, cuando adoptamos el pecado hipócrita de los fariseos. Si decimos que amamos a Yahweh y que todo lo hacemos por amor, entonces seamos apacibles, mansos y dóciles. Ser radicales y determinados, no significa que seamos crueles y jueces del prójimo. Muchos hermanos dicen que Yahshua exhorto que si podemos juzgar, claro que con justo juicio, eso es verdad, pero la vida nueva que Yahshua nos regaló, no consiste en vivir juzgando a diestra y siniestra a quienes no creen lo mismo que nosotros, a aquellos que aún no comprenden o a los incrédulos. Asumimos justo juicio cuando la Emunah está siendo alterada y contaminada en la Kajal, cuando existe transgresión a la Toráh, cuando hay desvíos de la senda antigua y existe peligro de pecado en medio nuestro. Este justo juicio debe ser eso, JUSTO, es decir, antes de cuestionar, juzgar y repudiar, conozcamos y comprendamos a quien se juzga, no sea que nos veamos luchando contra Yahweh mismo, por ser pasionales, más que rigurosos. Si antes de juzgar no nos consideramos a nosotros mismos, estaríamos viendo la paja en el ojo ajeno, teniendo nosotros quizás una gran viga. No olvidemos que si la sal se desvanece no sirve para nada. 

MatiiYah 5:13-16. Ustedes son la sal de la eretz; pero si la sal pierde su sabor, ¿Con qué se salará? No sirve ya para nada, sino para tirarla fuera y que la pisotee la gente. 14. Ustedes son la olam Or (luz del mundo). Una ciudad situada sobre un monte no se puede esconder. 15. No se enciende una lámpara para ponerla debajo de un cajón, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa. 16. Así debe alumbrar la Or (luz) de ustedes delante de la gente, para que vean sus buenas obras y glorifiquen a su Abba que está en el shamaim.

No pretendo exponer precedentes para discusiones vanas por causa de lo que escribo, lo que escribo es un mal que adolecemos cuando pecamos siendo hipócritas delante de Yahweh y con nosotros mismos. La diferencia la marca Yahshua HaMashiaj en nosotros y no nosotros en nuestro parecer.

Que nuestro testimonio y obediencia sea ecuánime y que sea el Ruaj de Yahweh siempre nuestra guía en todas las cosas y no erremos y fallemos cayendo en religiosidad, no erremos como los Fariseos de antaño. Que el Abba tenga Rajem de todos nosotros. Shalom alejem.

Con amor en Yahshua, Jimmy Zubarzo